ENEAGRAMA: ¿QUÉ ES?
Imagina una herramienta que te permita explicar tus comportamientos y los de los otros, tus pensamientos y las forma de pensar de las demás personas, basada en el autoconocimiento y el conocimiento de los demás. Una guía que explique qué te hace ver el mundo de la manera en que tú lo ves y lo percibes para empezar a percibir la realidad tal cual es, sin filtros. Un mapa del comportamiento humano básico que además explique lo que hace que otras personas puedan ver esa misma realidad de una manera distinta a la tuya.
El eneagrama constituye una fantástica manera de facilitar el crecimiento personal, un medio para poder realizar un trabajo interior. Cuanto más profundizas en el conocimiento de ti mismo, eres más consciente de tus pensamientos, comportamientos y las emociones que los acompañan. ‘
TIPOS DE PERSONALIDAD DEL ENEAGRAMA. LOS ENEATIPOS
El eneagrama de la personalidad es una guía del comportamiento humano. Es un mapa de la conducta que define 9 tipos de personalidad básicos y distintos entre sí y, además, las relaciones que existen entre ellos. Además, si se comprende adecuadamente dicho sistema o mapa, describe cómo y por qué estos patrones surgen cuando perdemos contacto con nuestras profundidades espirituales, durante la temprana infancia.

Y, por último, describe las transformaciones básicas, afectivas y de comportamiento que cada uno de los tipos de personalidad o “Eneatipos” debe experimentar si se compromete con un trabajo interior serio. Esta transformación tendrá como resultado la reconexión paulatina con nuestra dimensión espiritual profunda, nuestra esencia.
Este trabajo personal, dará como resultado el poder estar más presente en tu vida, en tu día a día para poder elegir libremente en cada momento la mejor respuesta a cada estímulo externo.
Todas las personas nacemos con una con una confianza innata y plena en la realidad. En función de la manera en que cada persona percibe cómo la trataron y atendieron durante la infancia, esa confianza se va reduciendo. Este es el origen de esos comportamientos o estrategias que vamos desarrollando y utilizando de manera habitual ante la creencia de esa realidad distorsionada que nos lleva a pensar que hay una forma “ideal” de presentarse a los demás, de estar en el mundo. Y pasamos de ser a estar y olvidamos SER, olvidamos nuestra verdadera naturaleza, nuestra identidad. Y nos identificamos con ese ideal de persona que imaginamos en nuestra mente y nuestro corazón, de manera inconsciente, porque ya no creemos que seamos esa persona que dispone de todo lo que necesita en su interior, que está conectada consigo misma, presente en su vida, en sus decisiones, en sus pensamientos y emociones. Y entonces, nuestros pensamientos y emociones dejan de ser puros para convertirse en creencias o ideas limitadas y emociones dañinas alimentadas por el ego, por la sensación de escasez y basadas en esa visión distorsionada de la realidad.
BENEFICIOS DEL ENEAGRAMA
Cuando nos adentramos en el conocimiento del Eneagrama y comenzamos a experimentar su sabiduría, adquirimos la capacidad de conocernos más y mejor, desde nuestra propia perspectiva, dejando a un lado las percepciones que las demás personas tiene de nosotros; de aceptarnos tal cual somos y de comprender mejor nuestros comportamientos y las motivaciones que los generan. A su vez, podemos desarrollar la capacidad de comprender a las demás personas, de aceptar que, al igual que yo, tienen sus propias motivaciones para pensar, sentir y actuar de la manera que lo hacen y que esto no es ni mejor ni peor, solamente es distinto.
Por encima de todo, cada persona es un ser único, irrepetible y valioso por lo que el Eneagrama no implica un sistema de etiquetado de personas, sino todo lo contrario. Ofrece la posibilidad de poder desprenderte de la etiqueta que has llevado puesta durante muchos años (identificación del ego); la única faceta que has dejado ver de ti, para poder mostrar al mundo todas tus múltiples facetas, todo tu ser y todo tu potencial. Quitarte la máscara que te limita, que te obliga a vivir de manera inconsciente, repitiendo comportamientos y hábitos emocionales y de pensamiento para comenzar a vivir plenamente una vida con realismo, autenticidad y presencia, una vida consciente.
La base del trabajo con Eneagrama está en la autoobservación de nuestra conducta de manera objetiva, una práctica que está presente en diversas disciplinas. Una práctica que permite aprender a ser consciente de tus pensamientos y sentimientos, adquirir el punto de vista de un observador, un observador interno desapegado que puede darse cuenta de que: “no soy mis pensamientos”, “no soy mis emociones”. Después nos ayuda a incrementar nuestra autocomprensión para ver qué motiva esa conducta y por último es necesario cultivar la presencia y la consciencia, una presencia que facilite nuestro proceso de transformación. De la misma manera que hacemos esto para con nosotros mismos, nos ayuda a hacerlo también con los demás, comprendemos mejor a las demás personas y podemos ver sus mismas perspectivas, muchas veces tan distintas a la nuestra.
El Eneagrama explica claramente las motivaciones de cada Eneatipo para actuar, sentir y pensar como lo hacen, sus “para qué”; qué creencia está detrás de cada una de las nueve interpretaciones de la realidad. Nos ayuda a descubrir nuestras habilidades y puntos fuertes para construir sobre ellos. También nos permite ver esas zonas más oscuras, la piedra con la que tropezamos un ay otra vez y aquí es importante no juzgarnos o culpabilizarnos por lo que descubrimos ya que la personalidad es simplemente una manera de defendernos desde nuestra infancia y que nos ha traído hasta el momento presente y que puede que ya no necesitemos.
ENEATIPOS, ¿QUÉ SON?
Cuando en un periodo determinado de nuestra infancia, las circunstancias que nos hacen sufrir y se repiten de forma continua, intentamos reducir ese sufrimiento y poder dar respuesta a nuestras necesidades. Estos cambios serán los que marcarán la personalidad o Eneatipo.
Desde pequeños, vamos moldeando nuestro comportamiento según la manera en que nos tratan y tendemos a creer lo que los demás ven en nosotros. De esta forma, acabamos aceptando eso que los demás dicen de nosotros como cierto y nos comportamos como tal.
Cada uno de los Eneatipos describe un modelo psicológico básico, un patrón o hábito infantil que la persona desarrolla para adaptarse a situaciones aparentemente estresantes y que se mantiene hasta la edad adulta. Cada Eneatipo encuentra una manera diferente de superar las dificultades para cubrir esa aparente pérdida de sus cualidades esenciales. Cada uno de ellos, representa un patrón mental, emocional y de comportamiento diferente y característico.
Cada Eneatipo busca ese ideal del ego, una imagen de sí mismo que desea alcanzar. Esta imagen idealizada es realmente una manera inconsciente de conseguir amor, seguridad y respeto por parte de las personas que son importantes para nosotros. Porque se nos olvida la idea de que todo eso está dentro de cada uno de nosotros, que el amor, la seguridad y el respeto parten de lo más profundo del ser y no del exterior, porque pensamos que otras personas nos lo pueden dar.
SIMBOLO ENEAGRAMA
Los Eneatipos son los tipos de personalidad que el Eneagrama presenta. Están representados en su símbolo, una estrella de nueve puntas circunscrita dentro de un círculo, que explica las relaciones entre ellos.
(IMAGEN DEL SIMBOLO ENEAGRAMA CON ALT Y TÍTULO “SIMBOLO ENEAGRAMA”)

TIPOS DE ENEATIPO. LOS 9 ENEATIPOS.
Los Eneatipos constituyen nueve formas distintas de ver el mundo.
Realmente, todos tenemos algo de cada uno de los nueve Eneatipos, es decir, que podemos identificar en nosotros características de todos ellos. No debemos olvidar que los Eneatipos son generalizaciones y que ninguna persona se ajusta exactamente a la descripción de su tipo, los Eneatipos son patrones generales y las personas somos expresiones únicas de esos patrones (Riso y Hudson, Comprendiendo el Eneagrama).
TRIADAS ENEAGRAMA
Los nueve tipos de personalidad el eneagrama, no son arbitrarios, cada uno pertenece a un grupo de tres denominado “tríada”. Cada una de esas tríadas se relaciona con un centro energético o de inteligencia humana y constituyen el origen de los nueve Eneatipos. Estos son los centros mental o del pensamiento, visceral o del instinto (acción) y emocional o del sentimiento y están directamente relacionados con la energía de la cabeza, vísceras y corazón.
Todos tenemos estos tres centros, pero tendemos a utilizar uno de ellos que es el que se pone en marcha el primero.
Esto significa que los Eneatipos de la misma tríada, comparten características y el mismo centro como base de la estructura de su personalidad. Por ejemplo, los Eneatipos Ocho, Nueve y Uno constituyen tres formas distintas de mostrar la ira o el enfado cuyo origen está en la falsa idea de que su necesidad de autonomía o independencia no va a verse cubierta; tienden a estar más en el presente que en el pasado o el futuro, y la idea que podría sobrevolar en su cabeza con cierta frecuencia sería algo así como: ¿por qué no me dejan en paz? Los Eneatipos Dos, Tres y Cuatro buscan su sentido de valor e identidad y manifiestan dificultad para gestionar la tristeza o la vergüenza que surge ante la falsa idea de no ver cubierta su necesidad de amor, aceptación y valoración; tienen a estar más en el pasado y podría plantearse la pregunta: ¿quién soy yo? Por último, los Eneatipos Cinco, Seis y Siete encuentran dificultad a la hora de tomar decisiones y gestionar la incertidumbre y constituyen tres formas distintas de mostrar el miedo cuando no ven cubierta su necesidad básica de seguridad; tienden a estar más en el futuro que en el presente o el pasado y podrían tener en su cabeza habitualmente la pregunta: ¿en quién puedo confiar?
En las tres tríadas existe un eneatipo que manifiesta la facultad característica de la triada de manera excesiva o de energía extrovertida Otro que la manifiesta de manera insuficiente o con energía introvertida. Y el tercero es el que está más desconectado de esta facultad característica. Este último es el n tipo primario de la triada. Y es el que se posiciona en cada uno de los vértices del triángulo equilátero del símbolo del Eneagrama, son los tipos Nueve, Tres y Seis. Los otros dos tipos de la tríada son variantes de este Eneatipo primario. Si nos centramos en la tríada emocional, observamos que en este caso el Eneatipo Dos es el que manifiesta excesivamente sus sentimientos, son más efusivos y amistosos. El Eneatipo Tres es el tipo primario de la triada y es el que está desconectado de sus sentimientos y se centran en las tareas en el rendimiento. Y el Eneatipo Cuatro es el opuesto al dos, es decir, el que manifiesta de forma insuficiente sus sentimientos. En la tríada mental, el Eneatipo Cinco es el que manifiesta excesivamente su pensamiento, son más cerebrales y mentalmente más intensos que los otros tipos. El Eneatipo Seis es el tipo primario de la triada y, por lo tanto, el más desconectado de esa orientación interna que proporciona el pensamiento. Y el Siete es el Eneatipo que menos se expresa el pensamiento, es decir, el opuesto al Cinco. En el caso de la triada visceral, el Ocho es el Eneatipo que manifiesta excesivamente la energía instintiva, su independencia y su vitalidad. El Eneatipo Nueve es el tipo primario de la tríada del instinto, con lo cual está desconectado de su energía instintiva, de la pasión, de la rabia y el deseo de vivir. El Uno es el tipo que menos expresa su energía instintiva, intentando controlarla.
¿CÓMO SABER TU ENEAGRAMA?
Se puede recurrir a la ayuda de algún experto que, a través de una entrevista de identificación, pueda determinar qué Eneatipos están más presentes y dejando siempre en manos de la persona la identificación final de su propio Eneatipo. Nada mejor que cada uno pueda llegar a ese momento de descubrimiento, en que comienzan a colocarse las piezas del puzzle.
Algunas dificultades que pueden surgir a la hora de identificar nuestro Eneatipo es que puede parecer que no nos ajustamos exactamente a ninguno de ellos. Esto es debido a que nadie es un Eneatipo puro, como expliqué anteriormente. Otra dificultad puede ser que dentro del mismo Eneatipo, existen varios niveles de desarrollo (algunos autores indican nueve niveles, tres inferiores insanos, tres medios y tres superiores sanos) y constantemente estamos oscilando entre las características sanas, medias e insanas del tipo. Además, nuestro proceso de maduración personal y experiencias vitales también influyen en la demostración del Eneatipo.
Independientemente de estos factores, los Eneatipos no discriminan en cuanto a nacionalidad, sexo o edad; hay Eneatipos de todas las nacionalidades, tanto hombres como mujeres y de todas las edades ya que el Eneatipo no cambia con el tiempo. Y el trabajo que propone el Eneagrama no pretende cambiar de Eneatipo, lo cual sería un engaño, sino crecer desde mi Eneatipo para llegar al nivel más sano.
La identificación del Eneatipo puede llevar algún tiempo de observación y estudio aunque el momento de descubrirlo suele venir acompañado de una sensación especial.
En mi caso, estuve algún tiempo pensando que me había identificado, aunque ciertos aspectos no llegaban a encajarme, poco tiempo después y con un nivel de conciencia y autoobservación más profundo mayor, descubrí que era otro distinto y al leer sobre este Eneatipo tuve la sensación de que alguien había estado espiándome durante toda mi vida y había descrito mis comportamientos.
Aún hoy, cuando leo algún libro de Eneagrama, se me eriza la piel al reconocerme en las descripciones con tanta claridad.
TEST ENEAGRAMA
También existen múltiples tests que pueden ayudar en esta identificación, aunque no dejan de ser una especie de ” fotografía instantánea” de la persona. A la hora de hacer un test de identificación del tipo, debemos realizarlo con honestidad, siendo conscientes de quienes somos y no contestando desde quién desearíamos ser. Otro aspecto importante es responder posicionándonos entre los 18 a 25 años, ya que en esa etapa es cuando la personalidad se manifiesta en su estado más “exuberante”, se supone que a partir de los 25 años ocurre un proceso de maduración personal que modera el Eneatipo en cierta medida.
ENEATIPOS EN EL AMOR
El estudio del Eneagrama y el conocimiento de los Eneatipos, nos puede llevar a comprender la forma en que las otras personas se ven a sí mismas en lugar de verlas desde nuestro punto de vista. Esta comprensión de los demás puede ser muy útil a la hora de profundizar en nuestras relaciones en general y en las relaciones amorosas, en particular.
La forma en la que perciben y viven el amor los Eneatipos puede resultar muy distinta y otros casos más parecida de lo que creemos.
CARACTERÍSTICAS DE LOS ENEATIPOS EN EL AMOR
Basándonos solamente en las características básicas de los Eneatipos, podemos predecir, en cierto modo, sus relaciones románticas. Aunque quiero recordar que cada persona tiene particularidades únicas que la hacen individual y distinta a todas las demás.
ENEAGRAMA: TRÍADA EMOCIONAL EN EL AMOR
Empecemos por la tríada emocional, los Eneatipos Dos, Tres y Cuatro. Recordemos que lo común a estos Eneatipos es su necesidad de recibir amor en todas sus manifestaciones: atención, valoración, admiración, aprobación, etc. El Eneatipo Dos busca en sus parejas ese amor ideal que le quiera como quiere que lo quieran, ser el centro de sus vidas. Tienden a pensar que sus “medias naranjas” son muy afortunadas por tenerlos ya que la pareja Dos dispone de todo su amor para darle. La pareja Dos es esa persona ideal que se entrega, se adapta para complacer y hace todo lo que considere que el otro desea o necesita para que la relación funcione. También exige esa misma atención como moneda de cambio y sentirá que no es suficientemente amada si no recibe constantes muestras de cariño, esperan grandes emociones. Lo que no entiende el Eneatipo Dos es que el amor es libertad, que ni se compra ni se vende, que existen muchas formas de demostrar amor que no sea carnal. Porque el Dos confunde amor con deseo. Podrá llegar hasta el punto de convertirse en un mendigo de amor. La pareja Dos necesita saber que la amarás aunque no satisfaga todas tus necesidades.
La pareja Tres es más fría, por aquello de que al ser el Eneatipo primario o central de la tríada emocional, está desconectado de la energía emocional y puede parecer más mental o racional. Su amor es más estratégico, más de apariencia, menos romántico y buscará en su pareja esa admiración tan buscada por el Tres. Pueden llegar también a competir con su propia pareja ya que la competitividad es un gran reclamo para ellos. Todo funciona bien si el Tres siente que su relación de pareja no obstaculiza el logro de sus metas, si le acompaña al triunfo como resultado de sus tareas. Tendremos que poner atención ya que la pareja Tres pide llegar a fingir o actuar sus sentimientos. La pareja Tres necesita saber que es amada por lo que es, no por lo que hace.
La percepción del amor en la pareja Cuatro se centra en la conexión profunda, en la exageración de los sentimientos, en la pasión como manera de profundizar en esos sentimientos. En muchas ocasiones desea lo inalcanzable y siente melancolía por lo que fue o pudo haber sido y no contempla lo que tiene más disponible. Huye de lo ordinario también en el amor. Muy sensibles y algo dramáticos pero con gran capacidad para acompañar en momentos de dolor. Los Cuatro necesitan saber que su pareja es ese ancla o cimiento que mantendrá la relación en los momentos más tensos de la relación por su emocionalidad tan cambiante.
ENEAGRAMA: TRÍADA MENTAL EN EL AMOR
En la tríada mental observamos una emocionalidad más templada, que en algunos casos se oculta totalmente. La pareja Cinco es en la que más se percibe esta ocultación, esta huida de la intensidad emocional para evitar el dolor. Ocasionalmente la pareja Cinco puede conectar con sus sentimientos en privado y alejado del resto, en soledad permiten que sus emociones afloren. A pesar de todo, les cuesta mucho expresar sus sentimientos con palabras y les es más sencillo hacerlo de forma no verbal. De la misma manera, valoran en los demás ese mismo control emocional. Así que, si no quieres espantar a tu Cinco, no lo achuches mucho y explica con antelación los planes en pareja para que pueda disponer de tiempo, uno de sus bienes más preciados. La ausencia de compromiso es su postura emocional más habitual, así que debes aprender a identificar sus sentimientos y su conexión a través de demostraciones de celos o competencia en unas ocasiones y de ternura y tracción sexual en otros.
La pareja Seis puede emplear mucho tiempo pensando en poder ser traicionado y cuestionando el amor. Su necesidad de seguridad y la duda, tan centrales en este Eneatipo, le harán vivir la lealtad en el amor como valor fundamental. Esta duda o desconfianza puede ocasionar celos, como una simple muestra de la inseguridad que sienten ante la incertidumbre. La labor de tranquilizar a tu pareja Seis le permite disipar sus dudas, necesitan saber que pueden confiar en ti. Tu pareja Seis te quiere por lo que eres y no por tu imagen. Al ser el Eneatipo central de la tríada mental, se muestran más cálidos emocionalmente que sus compañeros Cinco y Siete.
La pareja Siete hará del amor una aventura excitante, siendo la parte más emocionante la atracción inicial. Siempre encantadores y positivos, buscan el placer también en el amor como manera de escapar del dolor, al que no quieren mirar. Buscan relaciones estimulantes sin llegar a una gran profundidad de sentimientos. Confunden la necesidad con el deseo, el placer mental. Con cierta incapacidad para comprometerse a finalizar lo que empiezan sobre todo si asoma la sombra del conflicto. Su pareja ideal es alguien que le acompañe a pasarlo bien. Puedes ayudar a tu pareja Siete a profundizar en la relación, estando presentes en ellas aceptando las emociones menos favorables cuando aparezcan.
ENEAGRAMA: TRÍADA DEL INSTINTO EN EL AMOR
Por último, la tríada del instinto vive el amor de manera más impulsiva. El Eneatipo Ocho expresa el amor a través de la protección del otro y el poder en cuanto a establecer las reglas de la pareja, tener autoridad y el control, aunque ellos odian sentirse controlados. Esto les hace en ocasiones ser posesivos. Con cierta dificultad para expresar emociones intensas y su necesidad de dependencia. Grandes defensores de la verdad y su búsqueda. Les gustan las personas fuertes e independientes y son apasionados e intensos en pareja. Se aíslan cuando experimentan sentimientos de ternura ya que la sensibilidad es confundida con debilidad y no pueden mostrarse débiles sino fuertes, grandes, poderosos. Puedes ayudar a tu pareja Ocho siendo sincero, manteniéndote firme en las discrepancias, sin manipular, ocultar información o condicionar tu amor al buen comportamiento.
La pareja Nueve se funde con su ser querido hasta llegar a perder su identidad y para evitar el conflicto puede llegar a reemplazar sus necesidades esenciales, flexibilizarse o estar de acuerdo con todos los puntos de vista. Al ser el Eneatipo central de la tríada del instinto, es el que parece más desconectado de la energía de la ira y de sí mismo. Gran amante de la rutina, le incomoda el cambio. Puede mantener relaciones mucho tiempo por esta misma pereza al cambio, “lo que tú quieras, cariño”, “me da igual” son frases habituales. Perciben los deseos de su pareja antes que los suyos propios. Tu pareja Nueve puede volverse muy terca y cabezota si la sometes a la presión de tomar una decisión. Pueden ser codependientes, al igual que los Doses, de las personas que aman. Ayuda a tu pareja Nueve apoyando sus decisiones y permitiendo que asuman sus elecciones.
La pareja Uno busca la relación perfecta. Aprecian los detalles, la puntualidad, hacer lo correcto y ser muy responsables en sus relaciones. Les agrada que traigas algo de diversión a la relación y el humor es la gran medicina contra la preocupación. Muy leales y con elevados valores morales y éticos. Les importan las apariencias. Son muy auto críticos así que aligera este peso con alabanzas si vas a darles una opinión que pueden entender como una crítica. Ayúdale a ver que todos tenemos cosas buenas y menos buenas y a pesar de ello, ser una gran persona; a ver lo bueno también en las dificultades. Ayuda a tu pareja Uno haciendo que cuestione lo que es correcto y lo que es realmente bueno para ambos y su relación.
No perdamos de vista que estas descripciones se fundamentan en el estado insano de cada uno de los Eneatipos, la caricatura más “egóica” de los nueve tipos de personalidad.