¿Qué es la vida? Un frenesí. ¿Qué es la vida? Una ilusión, una sombra, una ficción; y el mayor bien es pequeño; que toda la vida es sueño…
Calderón de la Barca
Cuando somos pequeños, tenemos algo que luego perdemos, de mayores. Todo es nuevo y emocionante aunque casi todo es realmente imposible de realizar. De repente vamos creciendo y llega un día en que fracasamos, nos rechazan y nos decepcionan. Esa parte de nosotros que teníamos de niños, esa magia, va desapareciendo y nos volvemos serios, incrédulos.
Pero, si cada mañana al despertar te dijeras: “¿y si trato de alcanzar mis dueños?” “¿y si voy derecho a por lo que me gusta?”; sencillamente irías a por ello para recobrar esa magia en tu vida.
Cuando no persigues tu sueño, el trabajo al que te dedicas te parecerá una jaula, aunque sea de oro. Serás un cuerpo sin alma. Te sentirás frustrado, apático y tu vida no tendrá ningún sentido.
No hay nadie que sea responsable de tu vida, salvo tú mismo. Ese es el paso realmente importante que puedes dar para ser consciente de que debes cambiar las cosas, cambiar la mentalidad, cambiar de trabajo, cambiar lo que haga falta para que las cosas sucedan.
Muchas personas miran a los triunfadores y dicen y simplemente se dicen que han tenido suerte. Pero en la vida tú creas tu propia suerte y cuando llegan las oportunidades estás listo para aprovecharlas.
Las mayoría de las personas, no se atreven a dar el salto porque su situación no es lo suficientemente desesperada. Por lo general, hacemos algo cuando estamos tan hartos, tan al límite que ya no aguantamos más.
No esperes a llegar a este punto, ¡cambia tu vida ahora!
Todo lo que no sea verdaderamente felicidad y realización personal no es lo suficientemente bueno, no te conformes con menos de lo que mereces, nunca es demasiado tarde.
Ante las preguntas ¿cuál es mi propósito? ¿Cuál es la razón por la que estoy aquí?, las respuestas están dentro de ti y siempre lo han estado, aunque en un lugar muy profundo.
“Persigue tu felicidad”
Estas tres palabras son la brújula de tu vida.
En un momento de mi vida en que estaba perdida, hundida y casi muerta en vida, me pregunté a mi misma qué me diría una de las personas más importantes en mi vida, que desgraciadamente ya no estaba conmigo. Tras varios días la respuesta llegó, como una intuición, sin base científica, como un mensaje fugaz que decía: “sé feliz”. Tan fácil, tan sencillo, tan evidente que no era capaz de verlo.
Desde ese momento, cada día me levanto con un motivo, con un sentido,…con un sueño por cumplir.